
Un marketplace de arte con fines benéficos.
A principios de marzo, al inicio de la guerra, dos artistas ucranianos, Victoria Tissot y Mykola Kornilov, llamaron a la puerta del Museo Nacional de Cataluña. Buscaban un lugar donde expresarse, un espacio que fuera la sede temporal de su oficina simbólica para hacer visible el arte de su país en tiempos de conflicto.
Hoy, la sala Educart del MNAC organiza la exposición VESNA (Primavera) y ya cuenta con la participación de cinco artistas ucranianos.