
¿Te imaginas una pintura ecológica que hiciese el mismo efecto que las hojas de los árboles de un bosque frondoso?
Todo comenzó cuando una niña con diabetes rechazó su tratamiento con insulina por el dolor y porque no le permitía llevar una vida normal delante de Eduardo, uno de los fundadores de Medicsen. En ese momento, tanto Eduardo como el resto de fundadores comenzaron a trabajar en un dispositivo que permitiese evitar los pinchazos para los tratamientos de enfermedades crónicas. Este dispositivo permite administrar los fármacos a través de la piel, aumentando el tamaño de los poros a través de ondas inocuas.