
¿Te imaginas una pintura ecológica que hiciese el mismo efecto que las hojas de los árboles de un bosque frondoso?
El proyecto #micompañerodeviaje nace de la iniciativa de dos chicas, Mireia y Andrea, que durante la adolescencia tuvieron que aprender a convivir con el mismo compañero: el cáncer.
Su objetivo es ayudar a todos los jóvenes que están pasando por la misma situación, compartiendo sus preocupaciones, experiencias y vivencias. Es decir, darles aquella ayuda que les hubiera gustado recibir a ellas durante su proceso oncológico.
Además, recaudan fondos para aportar su granito de arena a la investigación contra el cáncer infantil y juvenil, financiando proyectos de investigación del Instituto de Investigación de Barcelona de la Vall Hebron.